martes, 2 de febrero de 2010

El mago de Oz





Hoy me propuse acercarles otro maravilloso libro de esos que no se olvidan El mago de Oz de Baum, tuve la suerte de encontarme con la historia a una edad muy temprana, y llenando mi infancia de fantasía, logró que mi imaginación volara junto al ciclón que llevó a Dorothy al mundo de Oz...una obra maestra que no pueden dejar de leer les aseguro; por eso les dejo unos links donde podran hacerse de la historia, y algunas fotos de uno de mis libros del El mago de Oz.




El folclore, las leyendas, los mitos y los cuentos de hadas han acompañado la infancia a lo largo de los siglos, pues todo niño sano siente una edificante e instintiva atracción por las historias fantásticas, maravillosas y manifiestamente irreales. Las hadas aladas de Grimm y de Andersen han llevado más felicidad a los corazones infantiles que todas las demás creaciones humanas.
Sin embargo, el viejo cuento de hadas, que ha servido durante generaciones, podría ahora ser clasificado de «histórico » dentro de la biblioteca infantil, pues ha llegado la hora de una nueva serie de «cuentos de maravillas» donde ya no aparezcan los estereotipados genios, enanos y hadas, con todas las horripilantes peripecias inventadas por los autores para transformar cada relato en una espantosa moraleja. La educación moderna incluye la moral; por lo tanto, el niño moderno sólo busca entretenimiento en sus cuentos de maravillas y renuncia de buena gana a todos los detalles desagradables.
Con esa idea en mente, la historia del «maravilloso Mago de Oz» ha sido escrita sólo para dar placer a los niños de hoy. Aspira a ser un cuento de hadas modernizado, que conserva las maravillas y la alegría y prescinde de las angustias y las pesadillas.
L. FRANK BAUM Chicago, abril de 1900